martes, 9 de junio de 2009

Taller I y II

El jueves llegamos bastante temprano al centro y transformamos el aula antes de que llegaran los niños y niñas. Apartamos todas las sillas, colgamos los dibujos que hicimos el día anterior en Ca l'Arenas y pusimos papel verde en el suelo. ¡Realmente el aula no era la misma! Marta y Meritxell íbamos con unos gorros hechos con medias y papel de diario en la cabeza.

Empezaron a llegar las niñas y niños que quedaban descolocadas/os: "¿Porqué está así la clase?", "¡Mira, este es el dibujo que hice en Ca l'Arenas!", "¿Por qué lleváis estos gorros?". Excepto algún pequeño acto de rebeldía, estaban interesadas/os y tranquilas/os. Llevábamos 'los gorros de las ideas', sirven para dejar volar la imaginación. "¡Si son unas medias!", nos gritaron. Pero no, ya no eran medias porqué en lugar de ponérnoslas en las piernas ahora las usábamos como gorros. Habíamos cambiado su uso. "Pareces una hormiga", "Pareces un caracol" "¡Que noooo! ¡Que un caracol se esconde en la cáscara!", "Pareces una jirafa", "Un elefante”... seguían diciendo.

Nos dimos cuenta que realmente los gorros nos hacían tener más ideas, así que empezaron a construir los suyos.

"¿Os habéis fijado en la cantidad de cartones que hemos traído?" dijimos entonces. Y de golpe un niño dijo: "¡¡¡Podríamos hacer nuestra casa!!!" Nos dimos cuenta que los gorros nos hacían estar conectadas pues ésta, era justamente la idea que habíamos pensado nosotras. De esta forma, empezamos a repartir un cartón a cada uno/a con la premisa de que tenían que dibujar su habitación en un lado del cartón y, en el otro, en lo que les gustaría convertirla. "¡A mi gustaría que mi habitación fuera un cine!", "¡Yo quiero un jacuzi!"... el ambiente se fue animando. Lo que debía ser una actividad de dibujo se transformó en una actividad de construcción. Con los cartones empezamos a construir volúmenes para escondernos, hacer túneles, pensar en un cine o imaginar un jacuzi. Marta y Meritxell estábamos realmente sorprendidas del buen recibimiento que estaba teniendo la actividad y de la energía y ganas que se sentía en las niñas y niños. Dejamos que pasara todo lo que ellas/os quieran que pasara e imaginaran; empezamos a hacer puertas, ventanas, agujeros en los techos... "Yo estoy haciendo un coche-cama-casa". Nos parecieron sorprendentes todas las ideas que salieron.


"¿Ha sido por los gorros de las ideas?" A partir de entonces, cada día los llevaríamos puestos.

Llegó el martes. Fue sorprendente el recuerdo que tenían del último taller. "¿Nos pondremos los gorros?", "¿Vamos a ir a Can Xalant?", "¿Están allí nuestras casas?" Todas tenían muchas ganas de continuar construyendo y de ver Can Xalant. "¿Está cerca de la 'Laia Arquera?" (*Laia Arquera es una escultura pública muy grande en una rotonda de Mataró). Acabamos de merendar mientras algunos llegaban y comentábamos lo que había pasado el último día. Como algunas niñas/os que no habían venido les contamos entre todos las experiencia. Nos pusimos de nuevo los gorros y fuimos caminando a Can Xalant.

Llegamos a Can Xalant, entrando por la puerta del jardín. Todas y todos corrimos hacia el 'Xiringuito' donde estaban colgados los dibujos del primer día. Nos sentamos en los restos de banco que quedan de la estructura. "¿Que se ha quemado?" preguntó alguien. Efectivamente, les explicamos cómo fue el incidente y empezamos a especular sobre el incendio, los bomberos, las partes quemadas y las partes que han quedado conservadas.

Pasado un rato, entramos en la sala polivalente de Can Xalant donde había colchones hinchables, cojines y alfombras de colores en el suelo. Al entrar, por supuesto, todas empezamos a tirarnos por encima y a jugar. Marta y Meritxell empezamos a cerrar las ventanas y apagar las luces. El ambiente se fue tranquilizando. En una pantalla se veían proyectadas imágenes del primer día. Marta y Meritxell habíamos preparado un Power Point que recogía las experiencias de las sesiones anteriores y..."Mira ¡El Xiringuito de abajo!" y "¡Alaaa, una caravana!".

Introducimos los dos dispositivos que íbamos a transformar fijándonos en el hecho de que uno era estático y el otro móvil ("¡Podría circular por la ciudad!”). ¿Qué nos gustaría que fuera? Una feria, un cine, un museo, una sala de juegos, un lugar para dormir, un teatrillo, un concierto...salieron de nuevo muchísimas ideas que luego rescataríamos. Con el Power Point también les mostramos imágenes de objetos, estructuras y arquitecturas que podríamos construir con materiales reciclados: botellas, ruedas, palés, telas, cartones...Habían muchísimos ejemplos y con ellos dimos pié a pensar como podríamos construir aquello que quisiéramos. Al final les mostramos la página Web de AGGTELEk y unos vídeos de Basurama donde aparecen un montón de artefactos con ruedas.

Terminada la sesión de Power Point de la que estábamos muy contentas habían salido de nuevo a partir de las imágenes y del interés generado, bajamos a bajo donde había nuestras casas de cartón dobladas. Como bien dijo una niña "¡No pasa nada! Para eso son de cartón ¡así las podemos transportar!". Todas y todos tenían muchas ganas de seguir con la construcción de sus casas pero como ya casi no quedaba tiempo decidimos hacer una actividad más corta: Íbamos a resignificar objetos.

Hicimos dos grupos. Cada uno escogió 5 objetos entre los que había: un flotador, un plumero, un marco, un cubo, una cadena, etc. El objetivo era que cada niño/a del grupo debía escoger un objeto y cambiarle su uso. Salieron varias ideas interesantes pero lo más importante fue que nos dimos cuenta de que si pensamos en otros usos ¡cualquier objeto se puede transformar!

Había llegado la hora de marcharse.

Para el próximo día, pintamos en cartón todas las ideas que tuvieron, ocupando toda una pared de una de las salas de Can Xalant.
"Transformamos el Xirnguito en..." (el próximo día os contamos más ;))

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